William Gregory era famoso por sus habilidades con los relojes de pared y de mano. A pesar de su edad, sus habilidades no eran malas.
Hace 16 años un hombre blanco de mediana edad vestido todo de negro le dejó un reloj de mano roto. A primera vista William se dio cuenta de que no era un reloj normal, pero no sabía porque. Esa noche William tuvo un extraño sueño... una canasta que contiene pelotas de volley...un gatito que maúlla despacio... banquetes y un pastel de cumpleaños en la mesa... bolas de billar moviéndose sin nadie jugando.
Era como si el sueño le estuviera diciendo algo...
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